Este departamento está ubicado al norte de Bolivia y su capital es Trinidad. Se caracteriza por tener una generosa vegetación, puesto que su territorio comprende verdes planicies y exuberantes bosques tropicales. Cuenta con un clima húmedo, caluroso y una superficie abundante en ríos, lagos, lagunas, etc.
Su actividad económica principal es la ganadería. Existe una enorme cantidad de cabezas de ganado bovino (más de 3 millones) que se alimentan en extensos pastizales. Abastecen de carne al país y gran parte de este producto está destinado a la exportación. También tienen cultivos de alimentos (yuca, maíz, arroz, bananas) para el consumo interno.
El Beni, cada año, recibe una gran cantidad de turistas interesados en convivir con la naturaleza. Tiene una impresionante variedad de fauna: jaguares, pumas, gatos monteses, loros de colores, tucanes, martines pescadores, parabas, garzas, pájaros carpinteros, ñandúes, perdices, caimanes, anacondas, serpientes, tortugas acuáticas, enormes peces de ríos, venados, monos, osos pardos, osos hormigueros, jabalís americanos, joches (enormes roedores), etc.
Los atractivos turísticos más conocidos de este departamento son:
Rurrenabaque: reserva natural considerada la “joya del turismo amazónico”, gracias a su biodiversidad y a sus paradisíacos paisajes.
Laguna Suárez: inmensa laguna artificial prehispánica, ubicada a 5 km de la ciudad de Trinidad. Es un bellísimo balneario de agua dulce, donde se practican deportes acuáticos. Cuentan con un club náutico y servicio de restaurante.
Riberalta: ubicada en la ribera alta del río Beni, es famosa por su artesanía (mimbre, tallado en madera, repujado en piel, etc.)
San Ignacio de Moxos: misión Jesuítica, cuya iglesia, barroco mestiza, fue construida en el siglo XVII y alberga un Museo Etnológico (expone tallados en madera, platería, etc.) y un archivo de música barroca.