Superando la calidad del baby alpaca y el cachemir, la fibra conocida como cashllama se está imponiendo en la industria de las prendas de vestir.
¿Cómo se produce el cashllama?
El cashllama se obtiene de la llama, pero de una forma diferente a la tradicional, se corta el pelo, sobre todo, el del vientre y el cuello del animal sin lastimarlo, después se procede a la selección y separado de las fibras más finas que están al interior de las gruesas del exterior de forma manual. No se usan químicos en el proceso de producción y se ha comprobado que la obtención del cashllama es la más sostenible del mundo, a diferencia del cachemir. Por otra parte la fibra de llama en sí ofrece una gama de 12 colores naturales que no se desvanecen.
Cualidades del cashllama
Es una fibra ecológica y biodegradable, el proceso de producción no afecta al medio ambiente ni lastima a las llamas que la producen.
La fibra es ligera, caliente, y no provoca picazón, como otras fibras naturales. Es extremadamente fina y suave al tacto.
Resulta ideal para personas con piel sensible porque es hipoalergénica, segura y muy requerida para confeccionar ropa de bebés porque, además, es antiinflamable.
Para los diseñadores y compradores es ideal, porque no se deforma y es duradera.
“El cachemir de los Andes”
El cashllama es denominado así, porque es extraído de llamas del altiplano boliviano (Los Andes) y su calidad es igual o superior al preciado cachemir, con la diferencia de que su producción es más sostenible y no afecta a al medio ambiente.
La marca cashllama pertenece la empresa boliviana Altifibers, que fue quien puso en práctica y mejoró el proceso de depilado en llamas, que antes sólo se hacía para obtener el cachemir y el pelo de camello.
Especificaciones
Cashllama : Depilado de llama
20-21 micrones
Longitud de la fibra: 55- 57 mm.
Cuidado:
Es ideal la limpieza en seco.
Se puede lavar a mano, con detergente suave y agua fría (30º).
A máquina en ciclo suave o ciclo de lana (30º) y si se usa secador, tiene que estar frío.
En resumen, esta fibra natural está revolucionando la industria. Su calidad y las ventajas que ofrece, respecto a las fibras naturales antes conocidas, la están convirtiendo en la favorita de los diseñadores y fabricantes de ropa. Y, como bono extra, su producción se hace en total armonía con la naturaleza.